PDF GRATUITO para Descargar en el Enlace Abajo

PDF GRATUITO para Descargar en el Enlace Abajo —

¿Cómo Puede el Movimiento Ordinario Ser Aterrador?

Comprensión de la Inseguridad Gravitacional

Más básica que nuestra capacidad de establecer relaciones con las personas, o de interactuar con objetos, es nuestra capacidad de responder a la gravedad y de relacionar nuestros cuerpos con el espacio que nos rodea. Este sentido, que proviene del sistema vestibular, es un aspecto crucial y fundamental para desarrollar una sensación de sentirse seguro y cómodo en el mundo.

Como bebés, comenzamos a desarrollar un sentido de confianza a medida que avanzamos por el mundo y nuestro sistema nervioso proporciona información precisa sobre la dirección que vamos, lo rápido o lento que estamos moviendo y de qué manera nuestra cabeza está posicionada. Somos capaces de sentir cuando nuestra posición de la cabeza cambia, a través de la estimulación a una parte del sistema vestibular que reacciona a la atracción gravitacional de la tierra.

Los niños que no perciben la gravedad de la manera habitual suelen tener mucho miedo al movimiento, a las alturas y/o al cambio de posición de la cabeza. Este tipo de problema fue llamado “inseguridad gravitacional” por la Dra. A. Jean Ayres, fundadora de la teoría y práctica de la Integración Sensorial® de Ayres. La mayoría de nosotros podemos imaginar sentirnos amenazados por estar en el borde de una cornisa que es muy alta, o por sentirnos desorientados cuando nos movemos tan rápido que no podemos distinguir inmediatamente hacia arriba de hacia abajo. Sin embargo, para algunas personas, incluso los ligeros cambios de altura o posición crean una sensación extrema de desorientación, miedo y ansiedad. Si bien puede parecer difícil, podemos tratar de imaginar el miedo que podríamos sentir en una cornisa de alto nivel. Si no puedes confiar en tu cuerpo mientras se mueve por el espacio, sería muy difícil confiar en alguien o en cualquier otra cosa.

Debido a que es difícil entender este problema, a menudo puede parecer que alguien que experimenta inseguridad gravitacional tiene un problema psicológico o de comportamiento, pero la base de este trastorno está relacionada con una integración sensorial ineficiente. Sin embargo, es ciertamente fácil imaginar cómo podrían desarrollarse problemas psicológicos o conductuales a partir de experiencias que crean tanto malestar en las acciones de la vida cotidiana. La mayoría de los niños atraviesan períodos de desarrollo en los que reaccionan con cierto temor a algunos tipos de movimiento o a las alturas. También hay muchas diferencias individuales en la forma en que las personas reaccionan a las alturas y a los movimientos rápidos. Sin embargo, cuando las reacciones a las alturas o al movimiento que generalmente no se notan o son molestas se vuelven extremas, o cuando comienzan a interferir con la capacidad de participar en actividades, puede existir un problema.

“Los niños que no perciben la gravedad de la manera habitual suelen tener mucho miedo al movimiento...”

Algunos de los signos de inseguridad gravitacional incluyen los siguientes:

  • Ansiedad cuando los pies se levantan del suelo

  • Un miedo antinatural a las alturas o a la caída

  • Una aversión inusual a tener la cabeza al revés

  • Miedo o malestar al caminar sobre superficies irregulares o escaleras

  • Alarma al ser inclinado hacia atrás

Otro problema relacionado se llama “intolerancia al movimiento”. La característica principal de este problema es una reacción extrema al movimiento lineal o rotatorio que generalmente no se percibe como amenazante o significativo. Las personas que tienen intolerancia al movimiento pueden experimentar náuseas y mareos y también pueden ser propensas a mareos extremos en el automóvil y en el mar. No sabemos tanto sobre este problema como sobre la inseguridad gravitacional, pero lo hemos observado en niños que tienen otros problemas sensoriales integrativos. También sabemos que las personas naturalmente tienen menos tolerancia al movimiento a medida que envejecen.

Pruebe estas actividades

Estas son algunas maneras en que puede ayudar a un niño con inseguridad gravitacional:

  1. Reconozca que este es un problema real para el niño y respete las reacciones del niño a diversas situaciones. Tratarlo como una debilidad emocional o un problema de comportamiento es probable que empeore las cosas.

  2. Con la guía de un terapeuta capacitado en Integración Sensorial Ayres, ayude a su hijo a participar gradualmente en actividades que sean amenazantes. Por ejemplo, si un niño está asustado por estar en un columpio, primero pruebe con un columpio en el que los pies del niño puedan tocar el suelo o sostenga al niño en su regazo en un columpio.

  3. La entrada adicional al cuerpo, como la presión suave pero firme en los músculos y las articulaciones, en la parte superior de la cabeza y a través del tronco, puede ayudar a que el niño se sienta más seguro. Por ejemplo, si el niño tiene miedo al subir las escaleras, intente sujetar las caderas y aplicar una presión suave. Esto puede sentirse más seguro que estar sostenido de la mano.

  4. El movimiento suave, hacia adelante y hacia atrás, suele ser más fácil de tolerar que el movimiento rotatorio. Trate de mover al niño de la manera más cómoda primero.

  5. Estar inclinado hacia atrás, o colgar la cabeza boca abajo, suele ser especialmente amenazante. No intente este tipo de movimiento hasta que el niño esté claramente listo para tolerarlo.

  6. Participar en el juego y la imaginación durante las actividades desafiantes puede ayudar a distraer la atención del aspecto aterrador de la situación.

  7. Practique actividades de movimiento con los ojos del niño cerrados. Esto puede ayudar a los niños a “sintonizarse” con la posición de sus cuerpos.

  8. Añadir pesos ligeros (por ejemplo, pesos de muñeca o tobillo o una mochila llena de frijoles o arroz) también puede ayudar a que el niño se sienta más seguro.

Consulte con su terapeuta para ver si estas actividades son apropiadas para su hijo y para obtener más sugerencias.

Si su hijo está teniendo dificultades que usted cree que pueden estar relacionadas con las ideas presentadas aquí, busque una evaluación con un terapeuta ocupacional calificado para evaluar todos los aspectos de la integración sensorial o, si su hijo ya ha sido evaluado y está recibiendo intervención, pregunte a su terapeuta si alguna de estas ideas puede ser útil para su hijo; su terapeuta también puede proporcionar sugerencias adicionales.

PDFs Gratuitos para Descargar

¿Cómo puede asustar el movimiento ordinario? Entendiendo la inseguridad gravitacional © es parte de una serie de “Páginas para padres” sobre el tema de la integración sensorial escritas por Zoe Mailloux, OTD/L, FAOTA. Puede ser reimpreso con fines educativos, con el título completo y la información de derechos de autor incluidos.